Elaboración de una historia clínica mediante cuestionario y entrevista médica.
Encuesta dietética dirigida por dietistas.
Analítica con perfil de los hidratos de carbono (glucosa, insulina, hemoglobina glicada e índice HOMA), perfil lipídico (triglicéridos, colesterol total, col-HDL, col-LDL, col-VLDL), homocisteína, PCR, transaminasas (AST, ALT, GGT), eje tiroideo (TSH, T4L y T3L) y otras hormonas (testosterona total, libre, estradiol, progesterona).
Estudio antropométrico evolutivo (peso, talla, estudio morfológico por imagen, impedanciometría octopolar, plicometría, antropometría por DXA). Consultas con nutricionistas para reestructuración de la dieta (educación nutricional).
Medición de la grasa visceral por DXA.
Medición de la tensión arterial y de la rigidez de las arterias con Sphygmocor.
Evaluación del grado de estrés oxidativo e inflamación.
Ecografía abdominal (si insulina alterada o sospecha de esteatosis hepática).
Marcadores tumorales en personas con obesidad (aumento del cáncer de próstata, de mama, de endometrio, colorrectal…).