El debate de la vitamina D


Un reciente documento de la Dra. JoAnn Manson propone suplementar los niveles de vitamina D con altas dosis, siendo contraria a otras corrientes que ponen en duda la utilidad de medirla.

Aunque algunos estudios sobre suplementación nutricional con vitamina D no revelan beneficios (probablemente debido a errores, como prescribir tratamientos con bajas dosis de vitamina D), existen a su vez numerosos estudios que correlacionan los bajos niveles de vitamina D con multitud de enfermedades relacionadas con el proceso de envejecimiento (cáncer, diabetes, osteoporosis, enfermedad cardiovascular…).

Dirección médica de Neolife


La Age Management Medicine a debate: suplementación nutricional con vitamina D, ¿sí o no?.

Cada día que pasa recibimos una gran cantidad de información médica y científica sobre muchas de las acciones que realizamos a diario en la Age Management Medicine. Esta es una medicina vanguardista, fundamentada en la literatura científica más reciente, y por tanto tarda en ser adoptada por la medicina clásica, oficial. Es normal. La MP4, Medicina Preventiva, Proactiva, Predictiva y Personalizada, no es una medicina para poblaciones: su propio nombre indica que es personalizada. Por ello muchas de las pruebas diagnósticas y de los tratamientos que prescribimos no son del uso regular en la medicina curativa. Sin embargo, cada vez hay más información procedente de la medicina clínica orientada hacia lo que llevamos varios años haciendo en la Medicina de las 4Ps.

El caso de la vitamina D es una claro ejemplo. Un reciente documento de la Dra. JoAnn Manson (profesora de la facultad de medicina en Harvard) publicado en Medscape (1), muestra el futuro del control y la suplementación con la vitamina D. La cuestión es si debe medirse rutinariamente el nivel de la vitamina D (25 OH Colecalciferol) y si se debe suplementar con altas dosis de esta vitamina. Este escrito en Medscape ha generado más de 220 comentarios del colectivo sanitario, lo cual refleja el gran interés que despierta este tema.

Existen decenas, si no centenares, de estudios observacionales que correlacionan los bajos niveles de vitamina D con cáncer, diabetes, osteoporosis, enfermedad cardiovascular, hipertensión, depresión, demencia y otras enfermedades relacionadas con el envejecimiento; sin embargo los estudios doble ciego, aleatorios, controlados y cruzados no parecen aportar luz a la necesidad de suplementar la dieta con vitamina D para prevenir estas enfermedades (2). Así las cosas, las autoridades sanitarias no se atreven a recomendar la medición rutinaria de los niveles de vitamina D y limitan las dosis para su suplementación a cantidades muy bajas. Ya vimos en un artículo anterior del blog de Neolife (3) que el motivo de estas dosis tan bajas no es más que un error de cálculo matemático; sin embargo las autoridades sanitarias tardan mucho en reconocer sus propios errores y cambiar su postura. Muchos apuntamos a que estos estudios doble ciego, aleatorios y controlados no observan los beneficios de la vitamina D simplemente porque están mal hechos: usan dosis muy bajas, durante muy poco tiempo y en colectivos poblacionales ya enfermos, en los que no es de esperar grandes cambios.

A pesar de las dudas que genera como tratamiento masivo para la población, la vitamina D es clave en programas personalizados de Medicina Antiaging.

En su escrito, la Dra. Manson apunta diferencias entre las recomendaciones para la población general y la actitud del médico ante cada paciente según sus características personales, Y propone tratamientos con altas dosis de vitamina D. Hay dos dichos muy interesantes: “un buen médico debe prevenir la enfermedad” y “muchos pacientes sufren las consecuencias de sus médicos complacientes”. No nos debemos conformar con recomendaciones generales de las autoridades sanitarias en contra de medir la vitamina D, más aún teniendo en cuenta las presiones que sufren para limitar el gasto sanitario.

Seguro que en un futuro no muy lejano veremos cómo los resultados de los grandes estudios doble ciego, aleatorios y controlados con altas dosis de vitamina D mostrarán lo que los estudios observacionales nos llevan diciendo muchos años.

En la clínica de medicina antienvejecimiento de Neolife medimos los niveles de vitamina D y la suplementamos con altas dosis (4) para colocarla en sus niveles de excelencia. Una vez alcanzados estos niveles, reajustamos las dosis a la baja y vigilamos a lo largo del tiempo su nivel plasmático.


BIBLIOGRAFÍA

(1) https://www.medscape.com/viewarticle/853373

(2) Hansen, K., Johnson, E., Chamber, K et al. “Vitamin D Insufficiency in Postmenopausal Women, a Randomized Clinical Trial”. JAMA Intern Med. 2015;175(10):1612-1621. doi:10.1001/jamainternmed.2015.3874.

(3) https://www.neolifesalud.com/blog/por-que-hay-que-tomar-altas-dosis-de-vitamina-d/

(4) https://www.neolifesalud.com/blog/vitamina-d-y-alzheimer/